jueves, diciembre 29, 2005

"Te doy mis alas"


Hace unos días asistí a una muestra de cortos en el teatro de la UdeC donde fueron presentados los trabajos de los alumnos de Comunicaciones del Duoc...¿cómo llegué ahí? no tengo idea, la cosa es que me vi sentada en una de las butacas del teatro escuchando al jefe de carrera que hablaba de las nuevas inversiones del gobierno en materia de comunicación audiovisual.

Ocho fueron los cortos que se presentaron, todos bastante interesantes, pero hubo uno que me dejó marcando ocupado "te doy mis alas"... se trataba de un anciano que vivía en la casa de su hija junto a esta, su esposo y su nieto; para su hija y su yerno el cuidarlo se había transformado en un problema porque, como muchos ancianos, sufría de demencia senil...vivía sumido en sus recuerdos. Sólo el nieto se daba el tiempo de acompañarlo y segirlo en sus ocurrencias. No pude evitar recordar a mi propio abuelo que en ese momento estaba en el hospital tal vez tan solo como terminó aquel anciano del corto... no tan solo porque nosotros vamos todos los días a visitarlo y nos preocupamos de que nada le falte, sobre todo mi papá. Pero no podemos hacer la vista gorda a que ninguno de sus demás hijos se ha tomado la molestia de visitarlo, es en este sentido cuando digo que está solo.

Cada padre trata de dar lo mejor de si para educar y formar en sus valores a sus hijos, se parte el lomo trabajando, pero para qué si después cuando sean ancianos para nosotros serán un estorbo en nuestras ajetreadas vidas (vidas que sin ellos no habriamos podido alcanzar). Hay muchos abuelos botados en asilos, cuando tienen suerte; otros simplemente terminan sus días en la calle o solos en sus casas. Da verguenza ver esto y me dio mucha pena ver a aquel anciano con la mentalidad de un niño y tan indefenso como cualquiera de ellos que era despreciado por su propia hija; ha sido inevitable ver mi propia vida y la relación que he tenido con mis abuelos: de los cuatro, tres han vivido conmigo (los padres de mi mamá y el papá de mi papá) y todos han recibido los cuidados que necesitaban... el ejemplo que he recibido de mis padres hace que me sienta orgullosa de ellos porque para nadie es fácil, no digo lo contrario, pero es nuestro deber velar porque un periodo tan difícil como lo es la vejez les sea fácil de llevar.

Mi abuelo aún está en el hospital, hace dos días cuando llegué a verlo estaba dormido y no hubo forma de despertarlo, yo no sabía que su sueño era falta de consciencia. Quién iba a pensar cuando hace 9 días cayó en el hospital por tener nauseas que su cuerpo no se estabilizaría? para nosotros no era novedad sus problemas cardiacos y renales, pero el daño neurológico, que "algo" que los médicos no han podido descubrir le está produciendo, ha sido para todos quienes vivimos a diario con él algo muy difícil de asimilar y más que a nadie a mi papá.

Tengo la mala costumbre de darle un bajo perfil a los problemas reales porque asi me es más fácil sobrellevarlos, pero cuando vi aquel corto la realidad de que mi último abuelo vivo estaba en ese momento en el hospital se me vino de golpe y no pude evitar la pena que estaba evadiendo hacía días: pena por mi abuelo, por mi papá que está destruido, por lo inevitable del fin de la vida. Si hay algo a lo que le temo es a la muerte, sobre todo de mi familia porque son lo más importante en mi vida.

Tal vez esperar que mi abuelo vuelva bien a la casa sea esperar un milagro, tal vez lo mejor sea estar conscientes que estamos esperando que ocurra lo inevitable porque mi abuelo está demasiado grave. tal vez su falta de consciencia sin razón sea que él se quiere ir. Nadie sabe lo que pueda ocurrir: dejo esto en manos de Dios, sólo él sabe que quiere para nosotros.

lunes, diciembre 26, 2005

No me acuerdo cómo se llama esto


Gracias San Feli por favor concedido
26 de diciembre de 2005

sábado, diciembre 17, 2005

Balance de fin de año


A menos de quince días del fin de este año y exactamente un mes para el día de mi cumpleaños número.... emm, como les iba diciendo: pocos días para que hayamos pasado un nuevo año al que yo calificaría de bastante especial: muchas cosas interesantes, muchas emociones vividas de manera muy intensa.

Y qué mejor manera de analizar este año que a través de un pequeño recuento:
  • Ramos aprobados: 14
  • Carreras de las que egresé: 1
  • Promedios bajo 5: 0
  • Buenos momentos con la familia: Bastantes
  • Malos momentos con la familia: idem
  • Discusiones con las hermanas: demasiadas
  • Buenos momentos con las hermanas: Pocos, pero buenos.
  • Caidas por alcanzar el biotren:1
  • Veces que corrí por alcanzar el biotren: 2
  • Viajes fuera de la cuidad: 4 (Rancagua, Bulnes, Santiago, Valdivia)
  • Noches fuera de la casa: Muchisimas tomado en cuenta carretes, viajes y salidas de estudio.
  • Cigarros: Este año tuve el honor de ahumar mis pulmones como nunca antes.
  • Alcohol: En la medida justa (descubrimiento de cerveza favorita bok).
  • Corazón roto: 2 veces.
  • Concierto de los continentales que vi: 2
  • Alumnos que no me quieren: al menos 20
  • Amigos nuevos: 1 (Feli)
  • Amigos perdidos:1
  • Amigas: Las mismas de siempre
  • Horas de clases como profersora: 30 aprox.
  • Horas de clase a las que asistí este año: Las de un semestre y medio o tal vez menos.
  • Enfermedades: 3 (gripes y faringitis)
  • Quemaduras feas: 1
  • Trabajos remunerados: 2
  • Celulares: 2
  • Bicicleta: día por medio en el verano, una sola vez durante el invierno.
  • Campamentos: 1 El tradicional campamento anual de mis amigos.
  • Cine: El ciclo de los martes en el Concepción, tele en casa deMabel, pelis en el compu, algunas que arrendé. (un año con poco tiempo para el cine)
  • Exposiciones: 5 (Dalí, Rodín y locales)
  • Marchas: casi todas las de mayo y junio
  • Tomas: 2 (campanil y casa del deporte)
  • Piedras que tiré a los pacos: (se salvaron los muy...)
  • Fiestas: No recuerdo exactamente porque sólo fui a fiestas en el verano, en todo caso la mejor fue la de la cocodrilo en Valdivia.
  • La mejor compra del año: en realidad fueron 2 (pendrive, polera azul marino)
  • Sustos: El más terrible fue cuando Soto me dijo que había reprobado didáctica... el muy.. me confundió con otra compañera.
  • Penas: 1 muerte y 1 amor no correspondido.
  • Alegrias: Muchas
  • Cortes de pelo: 1
  • Color de ropa: negro en su mayoria (asi que no es que no me cambie, sino que toda se ve igual)
  • Cambios de dormitorio: 1
  • Abandono relevante: Effetá (Los niños del hospital)
  • Congresos: 2
Entre las tantas cosas que he hecho este año, no creo poder decir que mi vida es fome. Ha tenido bastantes penas, pero se han visto reconfortadas por todas las cosas buenas que Dios deparó para mi, sin olvidar tampoco el importante apoyo que de parte de mis amiguis tuve cada vez que me ganaba la depre. Gracias a todos quienes me aguantaron este año, sé que no es fácil. Para mi tampoco lo es.

Es buen momento para decir que siento cada una de las veces que hice que alguien se pusiera mal, no siempre hacemos las cosas pensando en las consecuencias.

Me arrepiento de algunas cosas que hice porque tuvieron muy malas consecuencias, pero creanme que las volvería a hacer cada vez que se me presente una nueva oportunidad. Estoy orgullosa de mi por eso.

Mi memoría es un poco frágil y han pasado muchas cosas, si algo se me queda en el tintero (o teclado para ser más precisa) ¡¡¡¡¡¡qué alguién me lo recuerde!!!!!!.

Felices fiestas de fin de año a todos!!!!!!

lunes, diciembre 12, 2005

El nuevo fin de una etapa?




El hombre vive en promedio unos setenta u ochenta años y durante todo este tiempo dedica su vida terminar cosas. Partiendo por toda la enseñanza básica, luego la media y tal vez la universidad o el instituto y entre medio de estás imposiciones vamos quemando otro tipo de etapas: el primer beso, el último; la primera declaración, la busqueda de los amigos que realmente valen, las bellas espinillas.. en fin, somos seres socialmente programados para ir saltando pruebas y estados.

En estos días me tropecé con la noticia de estar estudiando para el último certamen y entregando los dos últimos trabajos (un módulo y un portafolio), esto significa que si mis trabajos son aceptados pasaré de ser una estudiante de pedagogía a una egresada de pedagogía. Tengo que reconocer que darme cuenta de esto me llegó como atropello, en realidad nadie analiza mucho las cosas cuando estamos a fin de semestre: nos límitamos a hacer.


El estar parada entre el tradicional ambiente estudiantil, que es muy cómodo para muchos, y el temido, pero a la vez ansiado por sus beneficios mundo del trabajo trae consigo muchas emociones y sentimientos encontrados. Yo al menos comienzo a pensar que dentro de poco, y si Dios quiere, ya no viviré en la casa de mis padres, tal vez ya no viva en esta cuidad....¿en qué lugar de chile estaré dentro de 5 años más?¿con quién viviré? ¿quién me va a cuidar cuando me entren los miedos?... tengo 22 años y muchas veces me veo atacada de temores nocturnos, si no fuera por mi papá que me ha ayudado a superarlos no sé que sería de mi ahora.


Y es mejor ni mencionar aquellas preguntas sobre si seré una buena profesora.... tengo que reconocer que me gusta mi carrera y que no he tomado mejor decisión en mi vida que esta, pero sé que es difícil y que las condiciones en que los profes trabajan no son las mejores, sin embargo, me gusta la idea de que esté en mis manos ayudar a la formación de personas y cuidadanos.


Lo que sea que Alá haya escrito para mi en su libro, espero considere el que a la muy amorosa directora del departamento de curriculum e instrucción le hayan gustado los trabajos que le entregue (junto a
Mabel) y así comenzar a trabajar tranquila en la tesis con mis amiguis Cristina y Evelyn; y obviamente poder decir con propiedad que terminé la carrera: salté una nueva etapa.